El juego y el mundo de los casinos siempre ha sido una obsesión para algunos de los mejores directores de todos los tiempos. El glamour, la pasión y, por supuesto, la emoción que destilan los personajes que derrochan cada momento de su vida como si fuese el último puede que sea un icono del cine moderno con todas las de la ley. Sin embargo, si hay un film que ha conseguido en los últimos años reflejar esta atmósfera con todas las de la ley esa es El gran Gatsby, por lo que vamos a compartir contigo un poco de todo lo que gira en torno al título.
Antes de la película
No tiene mucho sentido que nos pongamos hablar sobre el mundo que gira en torno al gambling (como con un Código promocional Sportium) centrándonos en el cine si no te explicamos un poco de dónde procede esa que hemos considerado como la mejor del género.
Como historia, El gran Gatsby tiene sus orígenes en una novela que apareció en 1925. ¿Que si te la recomendamos junto con la película? Por supuesto, y es que cada obra de arte es capaz de transportarte de una forma muy diferente hasta ese mundo en el que la ruleta no para de girar y la personalidad de Jay Gatsby consigue arrasar a todo el que se ponga por delante.
No creas que la novela es solamente una de tantas. Al contrario, aunque puede que el autor a su muerte en 1940 la creyese olvidada y superada. La realidad es que ha sido considerada como una de las mayores obras estadounidenses del siglo XX por parte de la crítica especializada.
Para que no te cueste demasiado encontrarla, la novela de El gran Gatsby es del escritor norteamericano F. Scott Fitzgerald, quien por cierto tuvo bastantes conocimientos sobre el mundo del juego por algunos aspectos de su vida privada.
¿Por qué el gambling?
El gambling, o simplemente juegos de azar como se diría en castellano, es un universo lleno de matices, aventuras y de muchas de esas historias que merecen ser contadas pero que en muchas ocasiones se pierden bajo las luces de neón de los casinos de Las Vegas o de la ficticia West Egg, localidad en la que se desarrolla El gran Gatsby.
Pero volvemos a la ambientación de la novela que, por supuesto, también es la de la película. Los años 20 en Norteamérica son sinónimo de jazz, crimen organizado, elegancia y mucho derroche.
Todos estos ingredientes se transforman en una obra de la que es difícil separarse y que, por lo tanto, ha alcanzado el estatus de icono en su adaptación al cine.
La película
Aparecida en 2013 nada menos que en el Festival de Cannes, la cinta fue celebrada desde sus primeros visionados por mantener el estilo de la película. Es decir, todo el mundo del gambling de los años 20 quedaba perfectamente trazado y plasmado en la obra del director Baz Luhrmann, quien supo desarrollar a las mil maravillas un universo que no siempre es fácil de entender y captar.
El gran Gatsby está repleta de melodías del jazz de la época y de ese ambiente en el que el juego, el alcohol y el crimen organizado son figuras capaces de trasmitir un romanticismo difícil de definir por la mayor parte de los ciudadanos.
En la película, como en la novela, todo se sale de lo normal para terminar siendo lo cotidiano de un momento histórico prácticamente irrepetible.
Si hay algo a destacar dentro de todo lo bueno que tiene este film no es otra cosa que la actuación de Leonardo DiCaprio. El consolidado actor da vida al mítico Jay Gatsby con un derroche de talento solo a la altura de los más grandes.
Eso sí, en lo que fue premiada la cinta fue en su diseño de vestuario, categoría en la que se llevó el premio Óscar de 2013. Razones no faltan para ello, y es que basta con echar una ojeada al trabajo para comprender que Catherine Martin fue capaz de transportar a cualquier espectador hasta los años 20.
Todo esto es lo que hace que El gran Gatsby sea la mejor película sobre gambling que se ha hecho nunca, por lo que no deberías perdértela de forma alguna.